Crush

Me he propuesto que, al menos, te fijes en mi. Y que sepas que existo.

Porque he buscado en tus sentimientos para encontrar debilidades. Alguna manera de penetrar en tu fortaleza.

Te he visto vulnerable y a la vez capaz de todo. Aunque no me conozcas mucho. Te he estudiado a fondo.

Eres la magia que ilumina la noche de estrellas, incluso cuando está nublado. Cuando me miras con tus preciosos ojos, me recuerda esa sensación y esa frase que dice "Netflix, manta y sofá". Y fuera, caer el diluvio universal.

Siento que soy ese último pétalo de flor, que se marchita en la peli de la bella y la bestia. Siento que tú eres la luz y el agua que me falta, que me alimenta, que me da alas. Donde brota una parte de mi que creía muerta. El romanticismo en mis venas.

Quisiera seguir creciendo, voy a serte honesto, sigo siendo un niño. Quiero volar como Peter Pan.

Soy la versión pirata de tu cuento de hadas. Porque jamás seré perfecto. Lo único que tengo es lo que siento.

El mar nunca podrá llorar lágrimas de azúcar, al igual que el sol no podrá brillar más que tu aura.

Quizás nunca me atreva a decirte estas palabras. "Te quiero con locura."

Parece que si te lo digo a la cara se convierte en real. Y vivo en la fantasía de que sientes lo mismo.

Quiero tanto que me quieras, que no lo digo como algo natural. Lo quiero y punto. Bajo unas estrictas condiciones. Me quieres o me quieres. No tienes más opción. Es que no la necesitas. Y yo sí que te necesito.

Sólo puedes besarme exactamente como me lo imagino. De esa forma en que tus labios rocen ligeramente a los míos y tu saliva se convierta en la mía. Y viceversa. Que sólo abramos la boca cuando nuestras lenguas estén dispuestas a quedarse a solas. El ritmo lo marcará cada situación. Y nuestro primer beso sería intenso, apasionado. Quiero observar largo tiempo tu cuerpo desnudo. Jugar a parar el crono con cada caricia y por cada sonrisa tuya tendría un minuto extra de vida. Para seguir indagando dónde más te gusta que te toque, que te muerda.

Pienso averiguar hasta el ruido que hacen tus sábanas cuando duermes, cuando sueñas. Darte mimitos. Acurrucarte en mi pecho. Susurrarte al oído.